Epílogo



La mayoría de estos cuentos los escribí en Marruecos mano a mano con mi hija. Mi hija se aburría, no había televisión, no teníamos gran cosa que hacer aparte de ir a la piscina, tomar el sol y leer. Peroella no se trajo tantos libros y al cabo de unos días se los había leído todos, así que hubo que inventar historias nuevas. Algunos son versiones de cuentos de toda la vida adaptados a los tiempos modernos. Algunos son nuevos y los creé para la ocasión. . Se trata de los cuentos que le contaba yo a mi hija para dormir y que me iba inventando, con valiosas aportaciones de mi hija que cambiaba lo que le daba la gana. Para mí lo importante era cambiar el cuento de forma que las princesas fueran asertivas y valientes y sobre todo, para que fueran divertidos y muy entretenidos. Al final embauqué en el proyecto a mi fantástica amiga Olga de Dios e hicimos una maqueta. No pensábamos venderlo a editoriales, porque éramos conscientes de que era una cosa muy difícil de vender.